La historia de Calpe está vinculada al mar y a la pesca, principal medio de vida para muchas economías familiares. Calpe tiene alma marinera y la importancia que tiene el mar para sus gentes se aprecia constantemente mientras recorres las calles del casco urbano, con edificios como la Cofradía de Pescadores, o te das un paseo por el puerto pesquero y visitas la lonja.

Puerto de Calp


El día de trabajo en el mar comienza muy temprano. A las cinco un reguero de pequeñas y medianas embarcaciones se alejan del puerto con pequeñas tripulaciones formadas por patrón, mecánico, cocinero y otros marineros que se dedican a diferentes labores como las guardias, la clasificación del pescado, el xorrar o izado de las redes a cubierta... etc.

Una vez llegan al caladero, lugar escogido por el patrón para echar las redes (calar), comienzan a faenar con la técnica del arrastre o correguda, tras un par de horas izan las redes a bordo y clasifican en cajas el pescado capturado. Una vez baldeada la cubierta, se echa de nuevo la red o bou al agua y se repite la misma operación hasta cuatro veces al día. Tras la última "calada" las barcas ponen rumbo al puerto para subastar la captura obtenida.

En Calpe, se capturan anualmente unas 1.700 toneladas de pescado en las modalidades de arrastre y trasmallo, siendo las especies más comunes: pescadilla, salmonete, calamar, caballa, pulpo, mero, dorada y varios tipos de mariscos como langosta, langostino, cigala, galera o cangrejo.   
Y tú, ¿tienes alma de marinero?